Hinault anticipa una "explosión" de Pogacar en este Tour a causa de un error que él también cometió: "Puede resquebrajarse como me pasó a mí y a otros porque..."

Bernard Hinault se ve reflejado en Tadej Pogacar. El ciclista esloveno ataca de lejos sin mirar nunca atrás, revoluciona las carreras y disfruta en cada carrera. El mito francés fue también un ciclista diferente, con desparpajo, sin medida y con un confianza total en sus posibilidades. Sin embargo, cree que Pogacar también comparte con él una ambición desmedida que en ocasiones puede llevar a "explosiones" en el Tour por agotamiento. Ese es el temor que alberga la leyenda francesa tras un calendario demasiado intenso en primavera.

Para Hinault, el ciclista esloveno va camino de ser el mejor de la historia: "No está lejos de Merckx. Es muy impresionante. Oigo aquí y allá que empieza a aburrir verle ganar tanto, pero no es culpa suya que los demás no puedan bajarle de su pedestal, ¿no?".

Pese a rendirse ante el talento de Pogacar, Hinault no cree que el ciclista esloveno sea imbatible en esta carrera: "Si nos fijamos en Pogacar, corrió cinco Tours y ganó tres, pero también perdió dos. Conoce ambas experiencias. Lo más difícil es volver a centrarse y empezar con la idea de que quiere ganar el Tour. Pero él también afronta el Tour con la idea de correr durante tres semanas, y en eso me parezco un poco a él. También sentí que me estaba divirtiendo, y no que estaba trabajando".

"Podría sufir un revés de su éxito"

El mítico ganador de cinco Tour de Francia advierte de un problema que puede pasarle factura a Pogacar como le pasó a él en su momento por abarcar demasiado: "Podría resquebrajarse y sufrir un revés de su éxito. Tiene una confianza absoluta en sí mismo, y nunca muestra el menor signo de fatiga, pero mantenerse en la cima de esta manera también le hace vulnerable. Hemos visto a muchos más que cayeron víctimas del agotamiento".

Hinault está cansado "de que señalen como dopado a u ciclista limpio como Pogacar. Basta ya de acusar sin pruebas. Gracias a Pogacar ha cambiado el ciclismo. Antes, me sentaba a ver la tele solo los últimos diez minutos, porque sabía que no iba a pasar nada. Ahora hay tanta lucha entre estos campeones que piensas: ‘¿Se van a dar una paliza estos idiotas o qué?’ ¡Y lo hacen!".

El pentacampeón del Tour de Francia no coincide con quienes están cansados de ver carreras predecibles donde se sabe que va a ganar Pogacar: "Lo que se ve ahora es un sueño para cualquiera que ama el ciclismo. Es un sueño ver corredores que atacan sin hacerse demasiadas preguntas, que observan un poco a sus rivales y luego, de repente, se lanzan".