Bajan los humos a Evenepoel y le 'rebajan' a ser gregario por primera vez en su carrera: "Junior, ¿cuántos vatios necesitas para ir a mi rueda?"

A Remco Evenepoel no se le veía precisamente una buena cara al acabar la etapa reina del Tour de Romandia. Desde su debut como profesional con 19 años y tras siete años ejerciendo de líder indiscutible de un equipo puntero como Soudal-Quick Step, a la estrella belga le toco 'rebajarse' y ejercer por primera vez de gregario de un compañero.

El fenómeno belga se hundió en la etapa reina del Tour de Romandia, no tuvo piernas para seguir a los mejores en un pduro y largo puerto final de 21 kilómetros y aprendió lo que es ponerse el mono de trabajo, ser humilde y preguntar a alguien qué ritmo mantener.

La estrella belga se descolgó a falta de 10 kilómetros a meta y asumió que debía ser humilde y cambiar su rol: "Con lo que tengo ahora no puedo hacer milagros, solo llevo dos meses entrenando y no tengo motor para seguir a los mejores cuando la carretera es muy empinada".

"Si hubiera seguido a los mejores habría estallado"

Evenepoel reconoció que por primera vez le tocó hacer a su compañdero Junior Lecerf una pregunta que él escucha cada día de carrera: "Le pregunté a Junior cuál era el riemo que quería para seguirme, cuántos vatios eran necesarios y a ver sí podía dárselos y así le llevé hasta la meta".

La imagen en la subida final fue singular, con Evenepoel agachando la cabeza para trabajar para un compañero que suele ser un fiel escudero en todas las carreras: "No podía hacer otra cosa.  "Si hubiera intentado seguir a los favoritos durante más tiempo habría podido estallar y perder muchos minutos. Trabajando para Junior hice lo mejor qu podía en ese momento".

A pesar de que finalmente perdió 1:46 con los mejores del día, Evenpoel no está preocupado de cara a su gran objetivo del año: "Sé que tengo tiempo de sobra hasta el comienzo del Tour para ir mejorando y llegar en forma y con potencia suficiente para aguantar en la montaña".