Ayuso pierde los papeles al recordarle su traición como gregario de Pogacar en el pasado Tour de Francia: "Si es que te tienes que reír porque..."

Juan Ayuso es un ciclista con un talento impresionante, su potencial de crecimiento es desconocido y todo apunta a que terminará convirtiéndose en una de las grandes estrellas del ciclismo profesional. Sin embargo, la humildad no es una de las virtudes que le definan. Para comprobarlo no hay más que preguntarle sobre su acto de indisciplina en el pasado Tour de Francia cuando decidió incumplir la orden de trabajar como gregario de Tadej Pogacar. En una entrevista con Eurosport, la joven estrella española perdió los papeles y culpó a la prensa de exagerar un hecho que fue para él una simple anécdota pese a que su propio equipo tomó la decisión de penalizarle por su rebeldía y dejarle sin poder participar en la pasada Vuelta a España.

El ciclista español de UAE reconoce que este tema le resulta ya cansino: "Mi presunto conflicto con Pogacar es una pregunta bastante recurrente. Es normal por lo que significa el Tour y por lo grande que es el equipo UAE. Por mi lado está todo bien y ya lo he aclarado varias veces".

Para Ayuso lo que ocurrió en el pasado Tour de Francia fue algo mínimo que terminó siendo un escándalo por el interés de los medios de comunicación por generar polémica: "En el Tour cualquier gesto pequeño, cualquier cosa se traslada y se hacen historias con miles de páginas que cuando las leo me dan ganas de reírme. Pienso ¿cómo de una cosa tan pequeña pueden salir unas cábalas tan grandes? Entiendo que lo que significa el Tour y lo que mueve lleva a cosas como esa...".

"Hablé con él en privado"

A pesar de que Ayuso apunta a la prensa como la culpable de engordar una situación insignificante, reconoce que tuvo que reunirse con Pogacar para arreglar la situación: "Después del Tour, que me tuve que ir antes de tiempo, estuvimos un tiempo sin coincidir y en Canadá, cuando volvimos a vernos, hablé con él en privado para dejar claras algunas cosas que se habían dicho en la prensa y que no eran ciertas. Él lo sabía, lo entendió y me dijo un par de cosas de vuelta que también me gustaron mucho".

El ciclista alicantino asegura que su debut en el Tour fue positivo: "Si quitamos los dos últimos días de mi debut en el Tour de Francia que fue cuando me empecé a sentir mal y no podía ni podía ni subir dos botes de agua desde el coche pero hasta el primer día de descanso todo fue bien. La verdad es que quitando eso la carrera me dejó un buen sabor de boca".

De cara al futuro se ve destacando en la próxima edición del Tour a la que acuda: "Lo que hice en el primer Tour de Francia me da confianza para cuando vuelva a ir. Ya la he afrontado, sé lo que envuelve, que es la carrera más grande del ciclismo y que se habla de todo lo que pasa hasta los pequeños detalles, pero es como cualquier otra carrera, hay más tensión pero en todas las carreras ya hay tensión, todo el mundo quiere ganar igual. El miedo al Tour se me ha pasado por completo y cuando vuelva al Tour lo haré confiado".