"Rasmusen estaba tan obsesionado con el peso que no llevaba la pulsera de Livestrong porque le sumaba 3 gramos de más al rodar en bicicleta"

A Michael Rasmussen se le recuerda, sobre todo, por el escándalo de presunto dopaje que protagonizó en el Tour 2007 cuando el equipo Rabobank con el que competía decidió retirarle de la ronda francesa cuando era líder a falta de cuatro días e iba disparado a por el triunfo con más de tres minutos de ventaja sobre el segundo clasificado. Esa edición se la adjudicó finalmente Alberto Contador.  

Sin embargo, hubo otro aspecto en su carrera que le convirtió en un 'rara avis' del pelotoón profesional. Al ciclista danés le conocín como 'el pollito' por presentar siempre un cuerpo muy fino, solo piel y huesos.  

58 kilos con 1:75 de altura

De hecho, no ha existido en el pelotón profesional en la historia un ciclista tan obsesionado con el peso. Es cierto que los ciclistas suelen cuidar al detalle cada gramo que ingieren y se pesan hasta varias veces al día, pero lo de Rasmussen iban más allá.   "Recuerdo que Michael fue el único ciclista que no se puso la pulsera de Livestrong que creó Lancer Armstrong para ayudar en la lucha contra el cáncer porque le añadía tres gramos de peso al competir", recuerda uno de los mecánicos que trabajó con el ciclista danés en el equipo Jumbo.  

El ciclista danés llegó a pesar en el Tour de 2007, en el que solo un escándalo por dopaje evitó su victoria, 58 kilos con 1,75 de altura. Su imagen tras quitarse el maillot recordaba según algunos medios de comunicación de esa época al "cuerpo de los prisioneros en los campos de concentración nazis en la segunda guerra mundial".   

"Contaba hasta los granos de arroz"

La obsesión por el peso de Rasmussen llegaba a tal punto que como recuerdan los que trabajaban con él "era capaz de poner menos cinta en el manillar para ahorrar 5 gramos o quitar pegatinas de la máquina porque le sumaba uno o dos gramos ".  

"Le hemos visto llegar a contar cada grano de arroz antes de comer y tomaba agua con los cereales del desayuno y no leche porque pesaba más. Solo lleva un portabotellas de agua en carrera mientras todos llevaban dos y su bicicleta Colnago Extreme-C pesaba 6,81 kg solo 10 g más que el límite mínimo", recuerdan desde el equipo Jumbo.   El peso bajo es fundamental en el ciclismo profesional, pero lo de Rasmussen batió récords...