¿… y si Froome no estaba tan acabado como parecía?

Chris Froome sufrió un grave accidente en la Dauphiné de 2019 y desde ese momento ha estado alejado de los puestos cabeceros en todas las carreras en las que ha tomado la salida. Muchas voces dentro del ciclismo le han aconsejado al ciclista del Israel que se retire ya que no tiene ninguna opción de luchar por el triunfo en el Tour de Francia, algo que es su principal objetivo para conseguir su quinto triunfo y meterse en el selecto grupo de pentacampeones en el que están Anquetil, Merckx, Hinault e Indurain.

Parece que Froome ha puesto fin a su calvario en el Tour de los Alpes Marítimos al finalizar en una destacada 11ª posición en una durísima carrera. Este puesto ha devuelto la esperanza al ciclista británico de cara al próximo Tour de Francia. “He visto una gran progresión en los dos últimos meses. Acabé muy bien de piernas tras esta carrera y ahora me volveré a probar en la Dauphiné. Mi único objetivo ahora es volver a ser el ciclista de antes del accidente y ese paso esta cada día más cerca”, comenta el cuádruple ganador del Tour de Francia.  

Froome se mostró encantado del poderío de su equipo ya que Jakob Fuglsang y Michael Woods fueron los mejores en el Tour de los Alpes Marítimos. “Fue un súper día para el equipo, obviamente, con Jakob Fuglsang ganando y con Michael Woods en segundo lugar" comentó Froome.

Froome señaló que el Israel ha superado los problemas con los comenzaron la temporada. “Es realmente bueno ver al equipo recuperarse ya que tuvimos un comienzo de temporada difícil con muchas enfermedades, pero creo que ahora mis compañeros gozan de buena salud y han comenzado a ganar carreras”, comentó el ciclista británico.