Mario Mola le quitará en Tokio a Frodeno el récord de grasa mínima con el que ganó el oro en Pekín 2008

Mario Mola se está preparando a conciencia de cara a su objetivo en los próximos Juegos de Tokio. En unas condiciones de alta temperatura y extrema humedad el peso toma aún más importancia y el triatleta balear va a llegar exprimido al máximo para tener una ventaja respecto a sus rivales.

Una de las claves del buen rendimiento habitual del está en el poco peso que debe mover, sobre todo en la carrera.  En Tokio llega con un índice de grasa muy bajo, muy parecido al que tiene un culturista o un boxeador el día de la competición (un 3,5%). El triatleta balear mide 1,78 y llega a Tokiode forma compite con 59-60 kilos. “Mi índice de grasa habitual es escaso, diría que entre un 4% a un 6% pero puede bajar en mi mejor estado de forma. En cualquier caso el triatlón es un deporte que no discrimina por constitución”, afirma Mario Mola.

Este porcentaje de Mario Mola es increíblemente bajo, sobre todo si se compara con otros deportistas de resistencia como Kilian Jornet (corredor de montaña) que está en torno al 8%."La verdad es que no me cuesta nada estar bajo de peso. De hecho, me doy muchos caprichos porque adelgazo con facilidad", señala el tricampeón mundial.

El porcentaje de grasa se ha convertido en un elemento muy importante en el triatlón, sobre todo en el olímpico donde se busca la mayor ligereza posible para ir a ritmos por debajo de 3 minutos el kilómetro en el 5.000 o 10.000 final. Por ejemplo Jan Frodeno, en los Juegos de Pekín 2008 redujo hasta el 4% su índice de grasa y se llevó el oro con un increíble peso de 75 kilos para 1,94 de estatura. Mario Mola va a reducir ee récord de Frodeno, al que se veía casi en los huesos en la cita china hace 13 años.

Eso sí, ante ese límite tan bajo de grasa tendrá que estar incluso más atento a la nutrición y la hidratación antes y durante la competición.